Hoy en día las empresas sienten la necesidad de reducir sus costes lo más posible. Esto es consecuencia de la inflación y del aumento de precios que sufre nuestra economía actualmente. En este post ofreceremos una pequeña reflexión y 9 formas que tiene tu empresa para ahorrar costes en el pago de impuestos.
CONTENIDOS
1. Revisar los impuestos locales
2. Recuperar el IAE de la pandemia
3. Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI)
4. Plusvalía municipal
5. ICIO
6. IVA
7. IVA fuera de España
8. Deducciones en el Impuesto de Sociedades por I+D
9. Deducciones por I+D con agrupaciones de interés económico y UTES
Como dicen los expertos, no se puede abordar una estrategia de reducción de costes en una empresa, atacando todos los gastos de la compañía con un solo golpe. Hay que comerse “el elefante” a trozos, poco a poco. Así pues, en esta ocasión empezaremos enumerando aquellos impuestos en los que es posible lograr una reducción de su importe:
1. Revisar los impuestos locales
En la fiscalidad de los inmuebles hay toda una revisión de elementos con los que podemos ahorrar costes en el pago de impuestos. Se trata del valor catastral, las tributaciones por transmisiones de inmuebles, el ITP (Impuesto de Transmisiones Patrimoniales) o el AJD (Impuesto de Actos Jurídicos Documentados), los temas de ICIO en el caso de que se hayan hecho nuevas construcciones y, por último, los temas de la Plusvalía.
Lo más aplicable para ahorrar costes, porque además existe en todas partes, es la parte del IBI (Impuesto sobre Bienes Inmuebles) y del IAE (Impuesto sobre actividades económicas). En el IAE, por ejemplo, sucede en muchos casos que se marcaron unas potencias asociadas al valor catastral y a la actividad en el momento de la constitución de la empresa, y desde entonces, no se han vuelto a revisar. Es importante actualizar los parámetros y ver si se está pagando de más. En caso afirmativo, existe la posibilidad de hacer ingresos indebidos. Si se ha estado pagando de más en los últimos 4 años y no ha prescito, se puede pedir la devolución de todo lo pagado de más.
2. Recuperar el IAE de la pandemia
Otra forma de ahorrar costes en el pago de impuestos es por el parón que se produjo durante la pandemia. Muchas empresas tuvieron que parar su actividad por impositivo legal, pero continuaron pagando el IAE (Impuesto sobre actividades económicas). Ahora, se puede recuperar lo pagado por el IAE durante el periodo que corresponda al tiempo en que la empresa cesó su actividad. Actualmente, por ejemplo, una gran parte del sector hotelero y el industrial, ya están recuperando parte de ese IAE que nunca debieron haber pagado.
3. Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI)
El IBI se puede reducir optimizando el valor catastral, que se calcula por el valor de la construcción y el valor del suelo. Como ya sabemos, se trata de un valor que se desglosa en una serie de parámetros muy complejos: superficie en metros cuadrados, coeficiente de antigüedad, etc. Pero haciendo un análisis detallado, se pueden encontrar errores en su cálculo y reclamar la devolución de los últimos 4 años no prescritos.
Hay muchas oportunidades de ahorrar costes asociados al IBI en sectores como el hostelero, el industrial y las oficinas. Cuanto mayor sea el volumen del espacio y más se pague, más complejo es de analizar y más probabilidades existen de identificar oportunidades.
Por ejemplo, un error, que suele ser muy común, es que las empresas que son concesionarias de hospitales y residencias de ancianos paguen por el coeficiente de gastos y beneficios. Sin embargo, este es un impuesto que solo deben pagar los que puedan disponer “libremente” de un inmueble y estas empresas no pueden hacerlo, porque son concesionarias. Debido a ello, muchas empresas están recuperando los pagos indebidos.
4. Plusvalía municipal
Otra forma de ahorrar costes el pago de impuestos es recuperando la Plusvalía Municipal. En los últimos años, el Impuesto de Plusvalía está en litigio, se está matizando y posiblemente se va a dejar de pagar. Las empresas que hayan pagado este impuesto en los últimos años deben revisar este tema porque a lo mejor pueden recuperar parte de ese pago.
5. ICIO
Este es un Impuesto sobre Construcción, Instalaciones y Obras. Está en torno al 5% del gasto de la reforma, de la ampliación de una fábrica o, por ejemplo, de una simple reforma por goteras. Aqu hay una seria de partidas que siempre están en discusión sobre si deben o no considerarse base imponible del impuesto. Por ejemplo, se debate si se debe incluir el margen de beneficio del contratista o si el propio mobiliario de un hotel se debe imputar como construcción, instalación y obra. En este sentido, suele haber mucho abuso por parte de la inspección porque en muchos municipios y diputaciones se ha privatizado este servicio y solo se busca conseguir la máxima recaudación.
6. IVA
Hay muchos autónomos que no recuperan el IVA porque no disponen de una factura completa. Ahora, gracias a una reciente sentencia europea, es posible hacerlo presentando un contrato que sirva de justificante de las operaciones comerciales.
7. IVA fuera de España
Hay empresas que pagan IVA a otros países por desarrollar su actividad en ese territorio: la factura de un hotel o la adquisición de mercancías, etc. Por ejemplo, si el IVA se paga en Alemania, hay que pedirlo en Alemania.
Este IVA puede ser recuperado anualmente, pero si expira el plazo para reclamarlo, que es el 30 de septiembre de cada año, ese IVA supondrá un gasto para la empresa. Para evitar esto, hay decenas de empresas en España que ayudan a recuperar el IVA en otros países. Si no se reclamaran, sería una pérdida muy importante para cualquier empresa y gracias a ello, se recuperan millones de euros cada año.
8. Deducciones en el Impuesto de Sociedades por I+D
Esta deducción permite ahorrar costes en el pago de impuestos. Se trata de identificar todos los gastos asociados a las inversiones: gasto de personal, coste de colaboraciones, materiales que se hayan utilizado, etc. …Si se puede considerar un proyecto de I+D, se aplica una deducción sobre la cuota íntegra positiva que va a ser de un 25% hasta el 42% para proyectos de I+D y de un 12% para proyectos de innovación tecnológica.
También en las deducciones por I+D hay una diferenciación en función del grado de innovación del proyecto. Cuanto mayor riesgo tiene el proyecto por su novedad, mayor deducción se puede aplicar. En este caso se puede llegar a una horquilla de entre el 25% y el 42% a la que se puede sumar un 17% por personal investigador dedicado 100% al proyecto. O sea, que se puede llegar a un 59% en el caso más ventajoso por proyectos de mayor riesgo.
Si lo que hay es un proyecto de innovación tecnológica en una empresa algo novedoso, pero con el que la empresa asume un riesgo menor, la deducción sería de un 12%.
9. Deducciones por I+D con agrupaciones de interés económico y UTES
Existen muchas empresas de investigación en universidades, empresas tecnológicas, startup, etc. que como todavía “no han encontrado” lo que están investigando, no hacen más que invertir sin ningún retorno. Si no tienen ingresos y no generan la obligación de pagar impuestos, en principio parecería que no se pueden deducir nada.
¿Qué se puede hacer en estos casos? Pues, asociarse con una gran empresa que se encuentre en una situación contraria: No invierte en I+D, pero paga muchos impuestos porque genera muchos beneficios. De esta forma, pueden ahorrar costes las dos empresas. Existen fórmulas como las agrupaciones de interés económico o las uniones temporales de empresas (UTE) que permiten compartir inversión, ejecución de proyectos o explotación de los resultados de una investigación.
Por ejemplo, un inversor de una empresa privada recibe, por la vía de la deducción fiscal en el Impuesto de Sociedades, el crédito fiscal de una empresa de I+D. Esto es algo cada vez más frecuente, aunque todavía es poco conocido. Es una manera de monetizar, por un lado, la deducción fiscal y, por otro lado, de pagar menos en el Impuesto de Sociedades a la vez que se ayuda a la innovación.
Estas son algunas de las formas en que una empresa puede reducir el coste de sus impuestos, pero no debemos de olvidar que la mejor manera de ahorrar costes en el pago de impuestos de una empresa está en el uso de la tecnología. Muchas soluciones, como un ERP financiero, son herramientas que tienen un gran impacto en crear procesos más eficientes y tienen un coste de implementación muy bajo. Si deseas informarte de cómo desde Extra Software podemos ayudar a tu empresa a reducir gastos de gestión, ponte en contacto con nosotros a través del siguiente enlace